Tu Recuerdo
Tu recuerdo aún no se desvanece, permaneces en mi corazón y siempre serás el recuerdo más bonito que tendré...

Un mundo a punto de mover sus cimientos a causa de una gran perdida, ¿Quién es capaz de comprender que ya no estará mas allí?, en ese lugar tan anhelado donde siempre me encamine en busca de él. Y encontrar solo un recuerdo vacío de lo que fue o pudo ser, poder sentir su esencia en cada rincón al cual me dirijo. Y pensar que lo único que vivirá ahora será su recuerdo, y que a su vez se desvanecerán aquellas historias pendientes por construir.
Solo un minuto más, un minuto para contemplar por última vez su cálida presencia, el brillo de su mirar y aquel resplandor sonriente que irradiaba alegría genuina. Aquel hombre que dedico su existencia a proteger sus tesoros más valiosos y amados. Y sin importar la fatiga, allí estaba reposado en aquel lugar, a la espera de un nuevo visitante.
Un último adiós, un momento lejano al cual anhelas regresar y disfrutar cada segundo que estas a su lado. Ese momento en el que jamás imaginaste no volver a verlo, no volver a sentirlo ni volver a escuchar su voz.
El mundo cambia en cuestión de segundos, pero jamás estas seguro de cuando cambiara, simplemente llega, te toma por sorpresa y derrumba por completo todo aquello que creíste tener bajo control. Y es allí donde te detienes y navegas en lo más profundo de tu mente, solo para notar su triste ausencia.
Te preguntas una y otra vez el porqué, buscas un culpable y te atormentas pensando en el hubiera. Dejas que la vida pase de largo sin vivirla y su recuerdo te consume.
Las estaciones van pasando sin percibirlas, el tiempo no se detuvo y la vida continúo. Ahora solo conservas su recuerdo y aquellas palabras que te alientan a seguir sin importar el dolor.
Ya no existen las culpas, ni las preguntas. Su recuerdo se siente nostálgico y aceptas que ya no estará allí para hablar, escucharte o simplemente reir a carcajadas. Comprendes al fin que solo llevaras su recuerdo en lo que viviste y vivirás.
Aprender a vivir sin su presencia es lo que nos queda, cumplir con sus deseos y recordar sus sabias enseñanzas sobre la vida. Sonreír a pesar de la tristeza que conlleva no tenerlo y decir al fin nuestro último adiós.